En E. VILA PROJECTS diseñamos soluciones sostenibles para alargar la vida útil de los tomates y mejorar la seguridad alimentaria de los mismos
La aplicación de luz ultravioleta (UV) como método para eliminar patógenos y alargar la vida útil de los tomates es una técnica utilizada en la industria de la alimentación para reducir la carga microbiana y extender la frescura de los productos. La radiación UV, en particular la UV-C, tiene propiedades germicidas que pueden ayudar a eliminar microorganismos perjudiciales en la superficie de los tomates.
La industria alimentaria debe tener en cuenta diferentes factores antes de elegir el equipo a instalar:
- 1. Selección del equipo UV: Es importante elegir un equipo UV adecuado que emita luz en la longitud de onda UV-C, ya que esta es la más efectiva para la desinfección. La intensidad y el tiempo de exposición también son factores importantes a considerar para garantizar una eliminación efectiva de patógenos sin dañar los tomates.
- Efectividad contra patógenos: La radiación UV-C puede inactivar bacterias, virus, levaduras y mohos que pueden estar presentes en la superficie de los tomates.
- Proceso de tratamiento: Los tomates se deben exponer de manera uniforme a la radiación UV-C para garantizar una desinfección efectiva.
- Impacto en la calidad: Aunque la radiación UV-C puede matar patógenos, también puede afectar ligeramente la calidad de los tomates si se utiliza en exceso. Es importante encontrar un equilibrio entre la desinfección y la preservación de la calidad del producto.
- Complementar con buenas prácticas agrícolas: La radiación UV puede ser una herramienta valiosa, pero no debe considerarse como una solución única. Es fundamental seguir prácticas agrícolas adecuadas, como el manejo higiénico de la cosecha, el control de la temperatura y la humedad, y el almacenamiento adecuado, para garantizar la seguridad y la calidad de los tomates.
