Aumentar el consumo de verduras y frutas como parte de una dieta saludable y reducir la ingesta de productos ultraprocesados , como los listos para comer, requiere esfuerzos continuos para conservar el valor nutritivo y prolongar la vida útil sin comprometer la seguridad y la calidad de los alimentos.
Los brotes recientes de enfermedades asociadas a productos agrícolas refuerzan la necesidad de que los productos del campo accedan a tecnologías de desinfección aunque la industria agroalimentaria generalmente produce alimentos seguros y de alta calidad durante todo el año.
Aunque nadie puede garantizar que la inocuidad de los alimentos no se incumplirá en algún punto de la cadena de producción, los productores y la industria alimentaria deben hacer todo lo posible para minimizar tales riesgos.
Para prevenir contaminaciones, los productores y la industria alimentaria deben desarrollar y aplicar tratamientos de descontaminación más eficaces centrados en técnicas y reducir los productos químicos actuales
Los equipos Ultravioleta sirven para reducir la actividad enzimática y la carga microbiana en los productos.
Los métodos no térmicos han surgido como alternativas atractivas al procesamiento térmico convencional.
Estos nuevos tratamientos de energía ultravioleta, que tiene aplicaciones en la industria alimentaria en lugar de los tradicionales desinfectantes y tratamientos térmicos.
Debido a su fuerte efecto germicida, la radiación UV-C tiene un gran potencial en el procesamiento de alimentos. Además, requiere un menor consumo de energía y parece ser una tecnología mucho más económica y respetuosa con el medio ambiente. Parece que ningún método o tratamiento por sí solo sería suficiente para prevenir la descomposición de frutas y verduras y alcanzar los objetivos de seguridad.
En general, se ha informado ampliamente en los últimos años que el uso combinado de varios agentes desinfectantes tiene un efecto sinérgico y da como resultado una mejor calidad sensorial y microbiana del producto.
Los equipos Ultravioleta para la industria Alimentaria, por su potencial, se revela como un área de gran interés académico y económico, que debe seguir desarrollándose en el futuro.