Antecedentes:
Japón informó de Candida auris, una nueva especie de Candida en 2009. Desde entonces, este organismo se ha aislado en cinco continentes.
Este hongo está asociado con brotes hospitalarios en todo el mundo. Muestran perfiles variables de susceptibilidad a los antifúngicos y desarrollan resistencia rápidamente.
Este ha sido un gran obstáculo para la prevención y el control de infecciones y los organismos de salud Pública de diferentes países.
La infección invasiva y la colonización ocurren en pacientes críticamente enfermos en unidades de cuidados intensivos. El aumento del uso profiláctico de fluconazol ha dado lugar a la aparición de patrones de resistencia a múltiples fármacos en Candida albicans y especies de Candida no albicans. La colonización de la piel y la contaminación de la superficie inanimada contribuyen a que el paciente transmita C. auris. La descolonización de la piel y la descontaminación de las superficies hospitalarias son pasos cruciales para controlar los brotes de C. auris. Diferentes organizaciones sanitarias sugieren el uso de diferentes agentes para la desinfección. El enfoque más eficiente en la descontaminación de superficies hospitalarias es el uso de dispositivos Ultravioleta. El Public Health England fomenta el uso de UV-C además de los procedimientos de desinfección manual para combatir la propagación de C. auris. Las habitaciones de hospital varían en tamaño y diseño. Factores como el tiempo de exposición y la distancia de los equipos UV son parámetros importantes a considerar para una descontaminación exitosa de la habitación